Creatividad y servicio ¡al fin juntos!
Corrían los años 90 cuando yo estaba en plena carrera, estudiando publicidad, tratando de potenciar mi creatividad al máximo y compaginándolo con un curso paralelo de diseño gráfico (lo que era en aquella época prácticamente aprender a manejar freehand, quarkxpress y photoshop, cada uno por su lado) tras haber visto